31 octubre, 2006

Mi primera cirugia


Hoy 2 de noviembre de 2006, me llevaron a la clínica infantil de otorrinolari... para sacarme las adenoides y las amigdalas. Tenía una obstrucción del 90% para respirar y comer. Me dio mucho miedo, llore desde que sentí el olor del hospital cuando nos bajamos de un carro amarillo de aquellos que hay muchos en las calles, mi papa me acompañó todo el momento, me abrazó y me consoló, mis dos abuelas estuvieron también conmigo apoyándome y mi mamá llamo mucho por celular, se mantuvo informada y me cuidó toda la tarde y los 5 días siguientes de tiempo completo.
Ahora una breve explicación de mi caso:
1. Amígdalas y Adenoides Las amígdalas y adenoides , son masas de tejido similares la de los nódulos linfáticos o "ganglios" que se encuentran en el cuello, ingle o axilas. Las amígdalas son dos masas que se encuentran detrás de la garganta. Las adenoides están en la parte superior de la garganta detrás de la nariz y en el techo de la boca (velo del paladar) y no son visibles a través de la boca sin instrumentos especiales. Las amígdalas y adenoides están cerca de la entrada de los pasajes de la respiración, donde pueden recibir los gérmenes provenientes del exterior que causan infecciones. Ellas "prueban" a las bacterias y los virus y pueden infectarse. Los científicos creen que funcionan como parte del sistema inmunológico del cuerpo filtrando los gérmenes que intentan invadir el cuerpo, y que ayudan a desarrollar anticuerpos para los gérmenes. Esto ocurre primariamente durante los primeros años de vida, tornándose menos importantes cuando transcurren los años. Los niños cuyas amígdalas y adenoides debieron ser extraídas no sufren de pérdidas en su resistencia.
2. ¿Qué afecta a las amígdalas y adenoides? Los problemas que más comunmente afectan a las amígdalas y adenoides son las infecciones recurrentes (de garganta u oídos) y el crecimiento significativo u obstrucciones que causan problemas de respiración y deglución. Abscesos alrededor de las amígdalas, amigdalitis crónicas, infecciones de las pequeñas cavidades dentro de las amígdalas que producen mal aliento, formaciones blanquecinas también pueden afectar a las amígdalas y adenoides, determinando que se inflamen y duelan. Los tumores son más raros, pero también pueden crecer en las amígdalas.
3. ¿Cuándo debo recurrir al doctor?Debe visitar al doctor cuando usted o su niño sufran de los síntomas más comunes de amígdalas y adenoides infectadas o que han crecido demasiado.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola:
En la vida hay que experimentar nuevas aventuras, el pasar por un hospital y mas aun por una cuchilla del cirujano es algo terrible. Gracias a Dios no me han operado y espero nunca tener que hacerlo, claro que debo de operarme la nariz por que la tengo torcida ja ja ja. Pero se que eres una bebe muy fuerte y vas a salir adelante con tu recuperacion. Un abrazo y saludes.